El "peligroso imbécil” es Monseñor Reig Plà. Y la frase que antecede la escribió Arturo Pérez-Reverte en su twitter.
Los irascibles laicistas que tanto poder acumulan en nuestro país (y entre los que se encuentra Arturo Pérez-Reverte), la izquierda política y mediática y las asociaciones que defienden los intereses del lobby gay, se turnan en la nueva tarea que se han impuesto desde el Viernes Santo: linchar a Monseñor Reig Plà.
En su homilía del Viernes Santo, Mons. Reig Plà se refirió al pecado en estos términos:
"El pecado es una ingratitud ante el amor más hermoso. Es una verdadera injusticia. Hemos pagado el bien que Dios nos ha hecho llevándole a la cruz”.
Y a continuación el obispo de Alcalá mencionó una serie de ejemplos de pecados de nuestros días: el adulterio, el aborto, los pecados de abuso que pueden cometer empresarios y trabajadores en sus relaciones laborales, las drogas, el alcohol, incluso los sacerdotes que llevan una doble vida. Y también ciertas conductas homosexuales.
Ya sabes que en España se puede hablar de cualquier cosa menos de los temas declarados tabúes por el lobby gay. Y cuando alguien se atreve a hacerlo, solo le espera el linchamiento. Eso es lo que le ha ocurrido a Mons. Reig Plà.
Entre anuncios de prostitución, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales pide "respeto” al obispo de Alcalá y exige censura: quieren que TVE retire el video del Oficio del Viernes Santo.
La mención a la homosexualidad ha desatado la ira, por un lado, del laicismo (es el caso de Pérez-Reverte y del PSOE, IU y los medios de comunicación que les jalean) y por otro, de esas organizaciones que se presentan como defensoras de los homosexuales pero que en realidad solo proponen convertir la genitalidad en único referente de la vida de las personas.
Don Juan Antonio Reig Plà es el obispo de Alcalá de Henares. Preside la subcomisión de Familia y Vida de la Conferencia Episcopal Española y es vicepresidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar. Arturo Pérez-Reverte quiere meterle en la cárcel o quitarle la nacionalidad española.
Para los dirigentes del PSOE y de IU, los representantes del "progresismo” y para los medios de comunicación que les secundan, expresar las creencias y las opiniones es actuar con "impunidad”. Y piden para el obispo de Alcalá un castigo:
Es la tradicional forma de actuar del intolerante, totalitario "progresismo”.
Al PSOE e IU, a las organizaciones que falsamente dicen defender a los homosexuales y a personajes como el señor Pérez-Reverte, se les llena la boca de palabras como "libertad de expresión” y "derechos”, el derecho a esto y el derecho a lo de más allá…
Pero esas libertades y esos derechos solo valen para ellos, no para los cristianos y sus creencias.
Aproximándose al lugar del linchamiento, el secretario de Relaciones Institucionales y Política Autonómica del PSOE, Antonio Hernando, ha afirmado:
"Las declaraciones del obispo de Alcalá de Henares contra la homosexualidad y el aborto demuestran que la Iglesia se crece cuando gobiernan los suyos”.
Y la portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, Pilar Fernández, quiere echar de la diócesis al obispo. Literalmente ha pedido "la destitución” de Monseñor Reig Plà. Y lo ha argumentado así:
"Este señor es indigno de representar a los católicos”.
Mons. Reig Plà participará en la ponencia La familia natural y la revolución contra la familia con el Cardenal Ennio Antonelli, presidente del Consejo Pontificio de la Familia.
En el Congreso se hablará precisamente de los ataques a la familia, del coste social de la pornografía, de la promiscuidad y la infidelidad, es decir, de todos los asuntos a los que aludió Mons. Reig Plà en su homilía, esos que tanto han agitado a los intolerantes del pensamiento único. Solo que en el Congreso Mundial de Familias el obispo de Alcalá podrá expresarse en un entorno de libertad para seguir exponiendo lo que piensa.
Los irascibles laicistas que tanto poder acumulan en nuestro país (y entre los que se encuentra Arturo Pérez-Reverte), la izquierda política y mediática y las asociaciones que defienden los intereses del lobby gay, se turnan en la nueva tarea que se han impuesto desde el Viernes Santo: linchar a Monseñor Reig Plà.
En su homilía del Viernes Santo, Mons. Reig Plà se refirió al pecado en estos términos:
"El pecado es una ingratitud ante el amor más hermoso. Es una verdadera injusticia. Hemos pagado el bien que Dios nos ha hecho llevándole a la cruz”.
Y a continuación el obispo de Alcalá mencionó una serie de ejemplos de pecados de nuestros días: el adulterio, el aborto, los pecados de abuso que pueden cometer empresarios y trabajadores en sus relaciones laborales, las drogas, el alcohol, incluso los sacerdotes que llevan una doble vida. Y también ciertas conductas homosexuales.
Ya sabes que en España se puede hablar de cualquier cosa menos de los temas declarados tabúes por el lobby gay. Y cuando alguien se atreve a hacerlo, solo le espera el linchamiento. Eso es lo que le ha ocurrido a Mons. Reig Plà.
Entre anuncios de prostitución, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales pide "respeto” al obispo de Alcalá y exige censura: quieren que TVE retire el video del Oficio del Viernes Santo.
La mención a la homosexualidad ha desatado la ira, por un lado, del laicismo (es el caso de Pérez-Reverte y del PSOE, IU y los medios de comunicación que les jalean) y por otro, de esas organizaciones que se presentan como defensoras de los homosexuales pero que en realidad solo proponen convertir la genitalidad en único referente de la vida de las personas.
Don Juan Antonio Reig Plà es el obispo de Alcalá de Henares. Preside la subcomisión de Familia y Vida de la Conferencia Episcopal Española y es vicepresidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar. Arturo Pérez-Reverte quiere meterle en la cárcel o quitarle la nacionalidad española.
Para los dirigentes del PSOE y de IU, los representantes del "progresismo” y para los medios de comunicación que les secundan, expresar las creencias y las opiniones es actuar con "impunidad”. Y piden para el obispo de Alcalá un castigo:
Es la tradicional forma de actuar del intolerante, totalitario "progresismo”.
Al PSOE e IU, a las organizaciones que falsamente dicen defender a los homosexuales y a personajes como el señor Pérez-Reverte, se les llena la boca de palabras como "libertad de expresión” y "derechos”, el derecho a esto y el derecho a lo de más allá…
Pero esas libertades y esos derechos solo valen para ellos, no para los cristianos y sus creencias.
Aproximándose al lugar del linchamiento, el secretario de Relaciones Institucionales y Política Autonómica del PSOE, Antonio Hernando, ha afirmado:
"Las declaraciones del obispo de Alcalá de Henares contra la homosexualidad y el aborto demuestran que la Iglesia se crece cuando gobiernan los suyos”.
Y la portavoz de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, Pilar Fernández, quiere echar de la diócesis al obispo. Literalmente ha pedido "la destitución” de Monseñor Reig Plà. Y lo ha argumentado así:
"Este señor es indigno de representar a los católicos”.
Mons. Reig Plà participará en la ponencia La familia natural y la revolución contra la familia con el Cardenal Ennio Antonelli, presidente del Consejo Pontificio de la Familia.
En el Congreso se hablará precisamente de los ataques a la familia, del coste social de la pornografía, de la promiscuidad y la infidelidad, es decir, de todos los asuntos a los que aludió Mons. Reig Plà en su homilía, esos que tanto han agitado a los intolerantes del pensamiento único. Solo que en el Congreso Mundial de Familias el obispo de Alcalá podrá expresarse en un entorno de libertad para seguir exponiendo lo que piensa.
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