Divina Misericordia

sábado, 27 de diciembre de 2014

Mons. Reig Pla: «España ya no es más que una colonia al servicio del Nuevo Orden Mundial»

Por un plato de lentejas. La peor de las corrupciones

El plato de lentejas: ahora un puesto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, pero también el acceso a otras cuotas de poder y a la financiación.

Hace unos días la Iglesia celebraba la Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Bienaventurada Virgen María, Patrona de España. El próximo domingo, en plena Navidad, viviremos la fiesta de la Sagrada Familia y también recordaremos a los Santos Inocentes. Con ocasión de todo ello, han ido viniendo a mi memoria las hermosas palabras que el Papa San Juan XXIII dirigió a nuestra Patria en 1960, y que luego transcribiré. Aquel mensaje del Papa «bueno» me ha hecho pensar en la enorme multitud de españoles, y de otros hijos de naciones hermanas que, el día 22 del pasado mes de noviembre, alzaron su voz para pedir el fin de la gran matanza de inocentes no-nacidos que se está produciendo, desde hace décadas, en España y en el mundo. Con respeto a todas las personas y por amor a ellas, creo necesario, no solo describir la realidad, sino también analizar las causas de lo que acontece; solo así será posible proponer soluciones reales, más allá de poner parches para controlar los síntomas del pensamiento débil, que es como una enfermedad, y que rebaja el nivel ético general, de modo que en nombre de un falso concepto de tolerancia se termina persiguiendo a los que defienden la verdad sobre el hombre y sus consecuencias éticas (Cf. Papa Francisco, 20-6-2014).

La historia que narra la Biblia Cuenta el libro del Génesis (Cf. 25, 19-34) que Esaú vendió su primogenitura, por un plato de lentejas, a su hermano gemelo Jacob. La primogenitura implicaba ciertos derechos, y sobre todo la transmisión por parte del padre de una especial bendición y de las promesas (Cf. Gn 28, 13ss). Analógicamente, esta historia se ha repetido infinidad de veces a lo largo de los siglos, tanto en lo que se refiere a personas, como a instituciones y naciones.

Un hecho reciente

Recientemente el Presidente del Gobierno de Esp«Llamar a las cosas por su nombre. Un verdadero reto para los católicos». Pero ¿cuáles son los verdaderos motivos de esta retirada?
aña y del Partido Popular anunció la retirada de la reforma de la ley del aborto que pretendía «limitar» cuantitativamente la sangría horrenda de los «los niños asesinados antes de nacer» (Papa Francisco, 25-11-2014), ciertamente un crimen abominable (Cf. Concilio Vaticano II, Gaudium et spes, 51), un continuo holocausto de vidas humanas inocentes(San Juan Pablo II, 29-12-1997). Sobre todo ello ya me pronuncié en una nota el pasado 24 de septiembre:

El plato de lentejas: ahora un puesto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, pero también el acceso a otras cuotas de poder y a la financiación

Para entender bien la decisión del Presidente del Gobierno no es suficiente recurrir a análisis electoralistas. Con todo respeto a su persona, hay que decir que una decisión tan grave responde a otras exigencias como nos muestra el documento «Prioridades de España en Naciones Unidas. 69º Periodo de Sesiones de la Asamblea Plenaria»; documento que se puede encontrar en la página web del Ministerio de Asuntos Exteriores. Dichas «prioridades» forman parte de lo que el Gobierno de España estaba dispuesto a hacer (ya lo venía haciendo en perfecta continuidad con las legislaturas que le precedieron) para conseguir un puesto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. El puesto ha sido conseguido, ahora ya sabemos por qué han hecho lo que han venido haciendo y qué van a seguir haciendo con toda diligencia, tanto a nivel nacional como autonómico.

Entre otras prioridades dignas de mención, quiero destacar dos de las indicadas en dicho documento:

a) «Continuaremos impulsando el pleno disfrute y ejercicio de derechos por parte de niñas y mujeres en condiciones de igualdad y no discriminación por razón de género, incluidos los derechos de salud sexual y reproductiva (…)».

b) «Continuaremos promoviendo el pleno disfrute y ejercicio de derechos por parte de personas gays, lesbianas, bisexuales, transexuales e intersexuales (LGBTI) y la eliminación de todas las formas de discriminación (…)».

 Desenmascarando eufemismos

Poniendo siempre por delante el amor, el respeto y el aprecio a todas las personas, sea cual sea su condición, es necesario desenmascarar las ideologías que engañan manipulando el lenguaje.

a) Naturalmente, condenamos, con toda firmeza, cualquier tipo de violencia contra niñas y mujeres y toda discriminación injusta, pero ¿qué significa en realidad «pleno disfrute y ejercicio de derechos por parte de niñas y mujeres» y en particular «los derechos de salud sexual y reproductiva»? La respuesta es: promoción de la anticoncepción desde niñas; esterilización; aborto libre, químico y quirúrgico, (en España ya son millones los niños abortados); manipulación de embriones y reproducción asistida (verdadero «pecado contra el Creador», Papa Francisco, 15-11-2014); promoción de la masturbación, con programas ya desde 0 a 4 años; esterilización, con autorización judicial, de personas con discapacidad psíquica; sustraer a los padres de las menores la patria potestad en todo lo que se refiere a la sexualidad de sus hijas; educación sexual obligatoria (teoría y práctica) de menores, por parte del Estado y según la perspectiva de la ideología de género, incluso contra la voluntad expresa de los padres; disminuir la edad legal de consentimiento para tener relaciones sexuales (en España la edad legal de consentimiento está ya en los 13 años); apertura a la sexualidad «intergeneracional»; etc. Buena parte de todo esto puede encontrarse en los «Estándares de Educación Sexual para Europa» preparados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el asesoramiento de International Planned Parenthood Federation –IPPF‒ (Federación Internacional de Planificación Familiar) y de World Association for Sexual Health ‒WAS‒ (Asociación Mundial para la Salud Sexual), así como en publicaciones vinculadas a los lobbys implicados.

A todas estas imposiciones del imperialismo transnacional del dinero – bajo apariencia de organismos internacionales (públicos y privados) ‒ hay que añadir ahora, al menos, dos más: 1) El Gobierno de España ha anunciado que va a reconocer el derecho de inscripción en el Registro Civil de los hijos de españoles nacidos mediante gestación subrogada (vientres de alquiler) en el extranjero. Esto no es más que dar amparo legal a la «trata» de mujeres extranjeras empobrecidas, con las que se comercia como si fueran «ganado», incluso «estabulándolas», durante el embarazo, en «granjas» al efecto. Seamos claros, esta abominable práctica no es más que una nueva forma de esclavitud. 2) Parece que el Gobierno de España quiere cambiar la ley para exigir el consentimiento paterno a las menores que deseen abortar. Que el Estado respete la patria potestad de los padres respecto de sus hijos siempre es un bien; dicho lo cual, con consentimiento paterno o sin él, el aborto es siempre un crimen abominable, que además destroza a la madre y a todos los que participan. Ahora bien, el imperio no cede jamás: siguiendo los criterios de los «Estándares de Educación Sexual para Europa», «expertas» de Naciones Unidas «contra la discriminación de la mujer» se han desplazado a España durante diez días para «recomendar expresamente» al Gobierno español que las menores de 16 y 17 años puedan seguir abortando sin consentimiento de los padres: más presiones, no van a permitir ni un minúsculo paso atrás. España, como buena parte del mundo, ya no es más que una colonia, al servicio del Nuevo Orden Mundial, donde se esclaviza a jóvenes y mujeres, mientras permanecemos aflojados y drogados con mucho «circo» y cada vez menos pan.

b) También aquí, condenamos, con toda contundencia, cualquier tipo de violencia contra las personas y toda discriminación injusta; con toda la Iglesia queremos continuar prestando ayuda a todos, con verdaderas entrañas de misericordia, sin juzgar a las personas (Cf. Papa Francisco, 28-7-2013). Pero ¿qué significa en realidad «pleno disfrute y ejercicio de derechos por parte de personas gays, lesbianas, bisexuales, transexuales e intersexuales (LGBTI) y la eliminación de todas las formas de discriminación»? 

La respuesta es: promoción universal de la llamada «ideología de género» y de las teorías queer, así como de su particular interpretación del concepto de «empoderamiento LGBTIQ»; derechos sexuales de los menores, así llamados, LGBTIQ, tal y como se definen por la IPPF y por la WAS; derecho desde los 0 años a «explorar» la identidad sexual; derecho a partir de los 4 años a recibir información sobre las «relaciones del mismo sexo»; derechos de los menores a su propia «orientación de género» (LGBTIQ); en el caso de los menores de edad con «deseo de cambiar de sexo» (DCS), «derecho» a que se les administren, cuanto antes, hormonas del sexo contrario y, en su caso, derecho ‒ incluso siendo menores de edad ‒ a la cirugía de reasignación aparente de sexo; matrimonio entre personas del mismo sexo; derecho de las parejas del mismo sexo a adoptar niños; «despatologización – vía legislativa ‒ de la así llamada transexualidad», con promoción de nuevas leyes llamadas de «no discriminación» y de «reconocimiento de derechos a las personas con deseo de cambiar de sexo»; derecho a la «no discriminación e igualdad de trato» que implica situar fuera de la ley a quienes, como la Iglesia, afirmen que la particular inclinación de la persona con atracción sexual hacia el mismo sexo, «debe ser considerada como objetivamente desordenada» (Congregación para la Doctrina de la Fe, Carta sobre la atención pastoral a las personas homosexuales, n. 3) o que «los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados» (Catecismo de la Iglesia Católica, n. 2357); impedir, y penalizar legalmente, que profesionales de la psiquiatría o la psicología puedan ayudar a personas con atracción sexual hacia el mismo sexo (AMS) o con deseo de cambiar de sexo (DCS), que libremente lo soliciten; sustraer a los padres de los menores la patria potestad en todo lo que se refiere a la sexualidad de sus hijos con AMS o DCS; educación sexual obligatoria (teoría y práctica) a menores, según los criterios LGBTIQ, incluso contra la voluntad expresa de los padres; disminuir la edad legal de consentimiento para tener relaciones «sexuales» entre personas del mismo sexo (en España, también aquí, la edad legal de consentimiento está ya en los 13 años); imponer, por ley, a las empresas e instituciones, la contratación de un porcentaje de trabajadores llamados LGBTIQ; inversión de la carga de la prueba cuando se producen denuncias por presuntas discriminaciones a personas llamadas LGBTIQ; promoción de la sexualidad «intergeneracional» LGBTIQ; etc. Buena parte de todo esto también puede encontrarse en los «Estándares de Educación Sexual para Europa», ya citados, y en publicaciones vinculadas al lobby implicado. En todo caso, hay que advertir que una vez ganada la batalla del mal llamado matrimonio civil entre personas del mismo sexo y la posibilidad de adopción, la gran ofensiva en estos momentos ‒ como puede comprobarse en los medios de comunicación ‒ es entorno al deseo de cambiar de sexo (DCS) ‒ la mal llamada «disforia de género»/«transexualidad» ‒, particularmente en la infancia; lo que sigue es la penalización de los padres, de las confesiones religiosas y de cuantos se opongan a la agenda prevista para promover estos llamados «derechos sexuales LGBTIQ».

Describir lo que esconden las palabras a través, como hemos dicho, de la manipulación del lenguaje no es ninguna condena a las personas, sino exponer con claridad lo que atenta contra la antropología cristiana a la que el Papa San Juan Pablo II llamaba «antropología adecuada». En definitiva, lo que se pretende con estas disposiciones es una mutación antropológica, o lo que es lo mismo, la construcción, cuyas raíces están en la ideología de género y sus derivadas, de un nuevo ser humano inspirado en el transhumanismo y el posthumanismo.

La «primogenitura» vendida

Con el documento «Prioridades de España en Naciones Unidas. 69º Periodo de Sesiones de la Asamblea Plenaria» que estamos comentando, se confirma, una vez más, lo que todos sabíamos: nos hemos convertido en siervos de las instituciones internacionales para la promoción de la llamada «gobernanza global» (Nuevo Orden Mundial) al servicio del imperialismo transnacional del dinero, que ha presionado fuerte para que España no sea ejemplo para Iberoamérica y para Europa de lo que ellos consideran un «retroceso» inadmisible en materia abortista y en los llamados derechos LGBTIQ.

Estamos vendiendo, por un «plato de lentejas», el proyecto de Dios sobre sus hijos: a) el amor y respeto a toda vida humana; b) la belleza de la igual dignidad, pero también de la diferencia entre el varón y la mujer; y c) la hermosura de la familia de fundación matrimonial entre un solo hombre y una sola mujer. Esto no solo está aconteciendo en España, se trata de un humillante vasallaje global ante el poder del dinero, y por ello recientemente (25-11-2014) el Papa Francisco advertía: «Mantener viva la realidad de las democracias es un reto de este momento histórico, evitando que su fuerza real – fuerza política expresiva de los pueblos – sea desplazada ante las presiones de intereses multinacionales no universales, que las hacen más débiles y las trasforman en sistemas uniformadores de poder financiero al servicio de imperios desconocidos. Este es un reto que hoy la historia nos ofrece».

«La muerte de Dios en el corazón y en la vida de los hombres es la muerte del hombre» (San Juan Pablo II, 11-5-1980): la peor de las corrupciones

Si matar a un inocente no-nacido se reconoce por la «leyes» como un derecho, toda corrupción o iniquidad es posible, tanto en el ámbito público como en el privado. Pero atención, para poder matar a un hermano antes hay que matar a Dios (al Padre), o venderlo: ambas cosas hemos hecho. ¡Tanto podríamos decir sobre esto! Que a nadie le extrañe, pues, la situación en la que se encuentra postrada España y buena parte del mundo. Ni los actuales partidos mayoritarios, ni los nuevos de corte marxista que, parece que emergen con gran ímpetu, respetan integralmente la dignidad de la vida humana, del matrimonio y de la familia. La verdadera respuesta a esta situación pasa por la regeneración moral de nuestro pueblo fruto de una nueva evangelización: proponer con amor y verdad a Cristo, pues «el misterio del hombre sólo se esclarece en el misterio del Verbo encarnado» (Concilio Vaticano II, Gaudium et spes, 22). Es urgente promover la gestación de auténticos cristianos y de familias católicas (la Iniciación Cristiana de Adultos según el modelo del Catecumenado Bautismal) capaces de impulsar una cultura respetuosa con la vida, el matrimonio y la familia. También es necesario impulsar una auténtica educación afectivo-sexual de los niños, adolescentes y jóvenes como vocación al amor y al don de sí. En la «Teología del cuerpo» del Papa San Juan Pablo II encontramos las claves para aprender a amar y desarrollar una auténtica ecología humana. Como repetía el Papa Benedicto XVI, la permanencia de la civilización cristiana pasa por la promoción de «minorías creativas» capaces de regenerar la sociedad. El instrumento es la Doctrina Social de la Iglesia que debe inspirar la presencia de católicos en las distintas instituciones sociales y en el ámbito de la política. Como decía el beato Pablo VI, la política es una forma alta de caridad; de ahí la pertinencia de recordar el antiguo adagio: Corruptio optimi, pessima (la corrupción de los mejores es la peor); y es que «la miseria más peligrosa, causa de todas las demás: (es) la lejanía de Dios, la presunción de poder prescindir de Él» (Papa Francisco, 20-12-2014).

Nadie debe dudar que estamos ante una situación de emergencia política. Esta situación está reclamando del laicado católico que sepa organizarse para ofrecer una lúcida respuesta en el campo cultural, en los medios de comunicación y en la política. No hacerlo en estos momentos supone un verdadero pecado de omisión.

Hay esperanza

No solo las personas, también las naciones son llamadas por Dios al cumplimiento de una misión, misión a la que se puede responder o no. España también ha tenido y tiene su misión, ¡no renunciemos a ella y a la bendición de Dios, nuestro Padre, por un plato de lentejas! Atendamos a las hermosas palabras con las que nos exhortaba el querido Papa San Juan XXIII y, con la gracia de Dios, hagámoslas efectivas: «Nos alegramos de que la España que llevó la fe a tantas naciones quiera hoy seguir trabajando para que el Evangelio ilumine los derroteros que marcan el rumbo actual de la vida, y para que el solar hispánico, que se ufana justamente de ser cuna de civilización cristiana y faro de expansión misionera, continúe y aun supere tales glorias, siendo fiel a las exigencias de la hora presente en la difusión y realización del mensaje social del cristianismo, sin cuyos principios y doctrina fácilmente se resquebraja el edificio de la convivencia humana. Que tengan levantada siempre su mirada Nuestros Hijos amadísimos de España hacia las altas metas, con el espíritu grande que los caracteriza, seguros de que la obediencia a la Ley de Dios atraerá la protección de la Providencia, que en el tejido de todo quehacer histórico guía a los individuos y a los pueblos, dóciles a la voz del Rey de cielos y tierra, in viam prosperitatis et pacis [en el camino de la prosperidad y la paz]» (San Juan XXIII, Mensaje dirigido al Cardenal Gaetano Cicognani, 5-6-1960).

Solo el nacimiento de Jesús, que estamos celebrando, le devuelve a cada persona su dignidad intransferible y la respalda con su alianza de amor para que no se pierda ninguno, especialmente los más pequeños, empobrecidos y sufrientes. En cambio, todas las ideologías ponen las personas al servicio de sus ambiciones, siempre vinculadas al poder y al dinero; lo hacen, según los casos, en nombre del «pueblo», del «proletariado», de la llamada «sociedad del bienestar», o del llamado «interés general». Han olvidado miserablemente que el fin de la sociedad es el «bien común», que pasa necesariamente por la atención y cuidado de cada persona, y por el desarrollo y educación de la misma, para hacerla capaz de su verdadero destino, de nuestro verdadero destino: Dios revelado como Amor.

Una gran batalla

En todo caso, hay que insistir en que quienes rinden culto a moloc y a mammona – la cultura de la muerte y la idolatría del dinero ‒ siempre van de la mano y sirven al Amo de este mundo.

Por eso, nuestra batalla, como nos recuerda el Apóstol Pablo, «no es contra la sangre y la carne, sino contra los principados, contra las potestades, contra los dominadores de este mundo tenebroso…» (Ef 6, 12). De ahí que es necesario, como nos exhortaba el mismo Apóstol, revestirnos con las armas de Dios: «estad, pues alerta, ceñidos vuestros lomos con la verdad, revestidos con la coraza de la justicia y calzados los pies, prontos para el evangelio de la paz, embrazando en todo momento el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los encendidos dardos del Maligno» (Ef 6, 14-16). Los católicos en este momento estamos ante una verdadera encrucijada y es necesario preguntarnos a quienes estamos dispuestos a servir: o a los dioses, y sus mensajeros, de esta nueva religión secular, o al verdadero Dios. Como en tiempos de Josué nuestra respuesta no puede ser otra: «Yo y mi casa serviremos al Señor» (Jos 24, 15).

 + Juan Antonio Reig Pla, 
obispo de Alcalá de Henares Alcalá de Henares, 
26 de diciembre de 2014 San Esteban, protomártir

sábado, 22 de noviembre de 2014

Miles de personas se manifiestan en Madrid por la derogación de la ley

Miles de personas se han manifestado este sábado en Madrid, 1,4 millones según los organizadores y unos 60.000 según fuentes policiales, para gritar a Rajoy y a la sociedad que basta ya de aborto y decirle que aún está a tiempo de derogar la ley actual y de retomar la reforma de Alberto Ruiz Gallardón que aunque no es tampoco la ley que quieren, daba un paso adelante.

 (EP/InfoCatólica) Desde el escenario de la Plaza de Colón, el presidente del Foro de la Familia, Benigno Blanco, se ha dirigido al presidente del Gobierno –momento en que se ha escuchado una fuerte pitada entre los asistentes– para pedir que con su mayoría absoluta sustituya la ley porque aún está a tiempo de cumplir su palabra».

Tienes la gran responsabilidad política y moral en tus manos y deseamos que aciertes en tu decisión. Piensa que tan responsable del mal es quien aprueba una ley injusta como quien pudiendo derogarla no lo hace, ha subrayado, al tiempo que le ha reclamado que cumpla con su programa electoral.

Las oleadas de gente bajaban por la calle Génova y al pasar por la sede del PP se escuchaban fuertes pitadas y gritos de ‘Vida sí, aborto no’. Entre los cánticos, los asistentes también han gritado ‘Que se vayan de aquí y dejen a los niños vivir’ y ‘Vida sí aborto no’, lemas que se sumaban al de ‘Cada vida importa’ que muchos llevaban escrito en sus camisetas.

Entre los manifestantes, se encontraba el matrimonio formado por Juan y Maria Elena con cuatro de sus cinco hijos. La familia ha viajado esta misma mañana desde Navarra para asistir a la manifestación y protestar por la no derogación de la ley actual del aborto». Juan asegura a Europa Press que la palabra que mejor define el sentimiento que les invadió al conocer que el Gobierno retiraba la reforma de Gallardón es decepción.

Por su parte, Lucía, de unos 60 años, ha viajado a Madrid en un autocar desde León porque le importa la vida y no quiere abortos». Tanto ella como la familia de Navarra han asegurado que vendrán a la manifestación del 14 de marzo si se convoca y con más gente.

En la cabecera de la marcha, tras la pancarta que decía ‘Cada vida importa’, se encontraban responsables de las asociaciones convocantes. La directora de Red Madre, Amaya Azcona, se mostraba ilusionada porque iban a desbordar las calles».

Somos cientos de miles de ciudadanos los que vamos a decir a Rajoy ‘te equivocas por haber quitado la reforma que no era nuestra ley pero suponía un paso adelante’, afirmaba justo antes de comenzar el recorrido.

Por su parte, el presidente de +Vida. Jóvenes por la Vida, Álvaro Ortega, ha asegurado que son muchos jóvenes los que se manifiestan hoy para decir que apuestan por la vida. Ya que somos el relevo generacional de la sociedad, velamos por un futuro con unos principios y valores, principalmente, que defienda la vida, el valor fundamental de la sociedad», ha incidido.

La marcha ha dado comienzo a las 12,00 horas y ha discurrido des la Glorieta de Ruiz Gimenez hasta la Plaza de Colón donde se ha celebrado un acto con música y testimonios que ha concluido pasadas las 14,00 horas.

Entre los políticos que habían confirmado su asistencia se encuentran la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y una veintena de parlamentarios aunque se han camuflado entre los asistentes a la marcha. El exministro Gallardón se encontraba fuera de España, según fuentes cercanas.

Fuente: infocatolica.com

domingo, 16 de noviembre de 2014

Monseñor Reig en Paracuellos: «Dichosa la nación cuyo Dios es el Señor»

El Obispo de Alcalá de Henares, Mons. Juan Antonio Reig Pla, ha presidido, en el Cementerio de los Mártires de Paracuellos, la Santa Misa con ocasión de la Clausura del Año de la Esperanza y el LXXVIII Aniversario del Martirio de 134 Beatos de Paracuellos de Jarama. La celebración ha tenido lugar el domingo 16 de noviembre a las 12 horas. 

Concelebraron superiores y representantes
de las órdenes a las que pertenecen los religiosos y sacerdotes cuyos restos mortales descansan en este Camposanto. La iglesia del Camposanto quedó totalmente desbordada, por lo que gran número de fieles debieron seguir la celebración desde el exterior. Al final de la Santa Misa Mons. Reig impartió la Bendición Apostólica con indulgencia plenaria.

Tras la Santa Misa se procedió a la exposición mayor del Santísimo Sacramento. Monseñor Reig Pla portando en sus manos la custodia con el Cuerpo de Cristo, y custodiado por los sacerdotes asistentes y el pueblo fiel, recorrió las fosas donde yacen lo beatos mártires y demás víctimas. Al llegar a cada fosa, sonaban, en primer lugar, unos breves acordes del «toque de silencio», tras lo cual Mons. Reig Pla exclamaba: «No temáis, hermanos, Cristo murió por vosotros y en su resurrección fuisteis salvados» (Cf. Ritual de exequias); dicho esto, y mientras se entonaba por todos los asistentes el canto «Christus vincit, Christus regnat, Christus ímperat», el Obispo procedía a bendecir la fosa y a los presentes con el Santísimo Sacramento.

 Homilía de Mons. Juan Antonio Reig Pla

Celebramos el día de la Iglesia Diocesana y nos hemos convocado en esta «Catedral de los Mártires» de Paracuellos. Es este un lugar sagrado y bendito que fue regado con la sangre de los testigos de la fe, nuestros hermanos, y que hoy brillan como lumbreras que iluminan los caminos de España y de nuestra diócesis de Alcalá de Henares.

Hoy, como entonces, la Iglesia está profetizada en esta mujer fuerte y hacendosa que canta el libro de los Proverbios. Como esta mujer, la Iglesia que camina en España está llamada a abrir sus manos a todos los necesitados y extender sus brazos a todos los empobrecidos de la tierra (Cf. Prov 30, 20). En ella confía el corazón de Cristo, su esposo, para que, con los torrentes de su gracia, pueda curar todas las heridas causadas por los pecados propios y ajenos, aliviar los corazones afligidos y confortar a todos los cansados y agobiados (Cf. Mt 11, 28).

Como a la mujer fuerte y hacendosa, a nuestra Diócesis Complutense no le faltan las riquezas de Cristo su esposo (Cf. Prov. 31, 11) quien nos ha embellecido con toda clase de dones. Entre estos dones hoy queremos destacar, con suma gratitud, a los 134 Beatos y a cuantos entregaron sus vidas y están sepultados en este cementerio que con tanto amor custodia la Hermandad de Nuestra Señora de los Mártires de Paracuellos. 

En concreto, según consta en los archivos, son miles las víctimas inocentes, centenares de ellas menores de edad, cuyos restos descansan en este Camposanto. De entre dichas víctimas hay sacerdotes y seminaristas de, al menos, ocho arzobispados y diócesis: Archidiócesis de Madrid, Arzobispado Castrense, Archidiócesis de Toledo y las Diócesis de Getafe, Ciudad Rodrigo, Jaén, Lugo y naturalmente Alcalá de Henares. 

Aquí también reposan los restos mortales de centenares de religiosos pertenecientes, al menos, a 20 órdenes religiosas: Agustinos, Capuchinos, Carmelitas, Carmelitas Descalzos, Claretianos, Dominicos, Escolapios, Franciscanos, Hermanos de las Escuelas Cristianas, Hospitalarios de San Juan de Dios, Jerónimos, Jesuitas, Marianistas, Maristas, Misioneros Oblatos, Paules, Pasionistas, Redentoristas, Sagrados Corazones de Jesús y María y Salesianos.

De entre estos religiosos ya han sido beatificados por el papa San Juan Pablo II, el papa Benedicto XVI y ahora el papa Francisco, 134 mártires: 63 religiosos Agustinos, 22 Hospitalarios de San Juan de Dios, 13 Dominicos, 6 Salesianos, 15 Misioneros Oblatos, 3 Hermanos Maristas, 1 sacerdote de la Orden de San Jerónimo, 1 Capuchino, 1 religioso de la Orden del Carmen y 9 Hermanos de las Escuelas Cristianas (La Salle). 

De entre los miles de seglares católicos, cuyos restos mortales descansan en este mismo lugar, muchos pertenecían a asociaciones y movimientos apostólicos como Acción Católica, la Adoración Nocturna Española o las Congregaciones Vicencianas.

Si el don más preciado que podemos recibir es el don de la fe, estos hermanos nuestros, con su testimonio, nos allanan el camino para abandonarnos en Dios y crecer en nuestra esperanza del cielo. Ninguno de ellos, a pesar de sus sufrimientos, renegó de su fe y murieron proclamando el reinado de Cristo y su amor a España. Con ellos, hoy queremos renovar nuestra adhesión a Cristo y, como ellos, queremos depositar en Él toda nuestra esperanza, sabiendo que no quedaremos defraudados (Cf. Rm 5, 5). Para expresar el triunfo de la resurrección, verdadera justicia de Dios, al finalizar la Santa Misa, bendeciremos con el Santísimo las fosas donde fueron sepultados. Será un modo de mostrar el verdadero rostro de Dios que ellos buscaron durante su vida y en su muerte.

A nuestros hermanos, testigos de la fe, no les sorprendió la muerte como un ladrón. Ellos, en efecto, «no amaron tanto su vida que temieran la muerte» (Ap, 12, 11). Al contrario, como «hijos de la luz e hijos del día» (1 Tes 5, 5) esperaban al esposo para consumar su amor con el sacrificio de su vida. Por eso, hoy damos gracia a Dios por su fortaleza y les suplicamos que nos ayuden a estar vigilantes y clarividentes para continuar sembrando la fe en nuestro pueblo. Como nos advierte el Apóstol, no podemos entregarnos al sueño como los demás (Cf. 1 Tes 5, 6). Los católicos en este momento complejo y difícil para España, debemos estar dispuestos a dar razón de nuestra esperanza (Cf. 1 Pe 3, 15) y ofrecer a todos la luz del Evangelio. Llevados de la mano del Santo Padre, el Papa Francisco, y de los pastores que nos guían hemos de revindicar las raíces cristianas que han hecho posible crecer este árbol frondoso y lleno de frutos que ha sido España. De manos de la Iglesia Católica se ha construido la identidad de nuestro pueblo que ha sido generoso sembrando la fe por todas partes con una pléyade de confesores y mártires.

Cuando estamos finalizando el Año litúrgico y al concluir en nuestra Diócesis el Año de la Esperanza, escuchemos una vez más la voz del salmista que nos dice «dichoso el que teme al Señor y sigue sus caminos» (Sal 127). Como herederos de los testigos de la fe que reposan en este Camposanto queremos reafirmar el Señorío de Cristo y nuestra voluntad de contribuir, con la gracia de Dios, a promover una España digna y justa, una Nación cuyo Dios sea el Señor (Cf. Sal 33), un lugar donde se respete la vida, florezca el amor entre los esposos, abunden las familias con hijos, como renuevos de olivo alrededor de tu mesa (Cf. Sal 127, 3), donde reine la paz y la justicia, y se acoja con amor, misericordia y verdad, a los empobrecidos, a los que sufren y a todos los heridos, donde se acojan a los concebidos no nacidos y desaparezcan todas las leyes inicuas que socavan el Estado de derecho.

Ayer mismo, el Santo Padre el Papa Francisco enseñaba: «¿Por qué la Iglesia se opone al aborto? (…) porque allí hay una vida humana, y no es lícito eliminar una vida humana para resolver un problema»; y continuó: «Lo mismo vale para la eutanasia», advirtiendo que «todos sabemos que con tantos ancianos en esta cultura del descarte se hace esta eutanasia escondida». Y añadió: «Estamos viviendo un tiempo en el que se experimenta mal con la vida, se hacen hijos en cambio de acogerlos como un don (…). Tengan cuidado que esto es un pecado contra el Creador, contra Dios creador que ha creado las cosas así» (Discurso a los participantes en el Congreso conmemorativo de la Asociación de Médicos Católicos Italianos con motivo del 70 aniversario de su fundación, 15-11-2014). Acogiendo las palabras del Santo Padre, quiero recordar que ninguna ley puede permitir quitar la vida a un solo inocente, sea no-nacido, anciano, enfermo, con alguna discapacidad, etc. No se trata de matar a pocos inocentes sino de no matar a ninguno. Si vivimos en sociedad es para ayudarnos y protegernos, no para destruirnos.

Con la asistencia de la Virgen María, Reina de los mártires, recibamos con gratitud los talentos que nos regala el Señor. Con la asistencia divina procuremos hacerlos crecer para que Dios sea glorificado y nuestros hermanos más pobres encuentren en la Iglesia la casa donde poder vivir. Como nos recordaba Benedicto XVI el «humanismo que excluye a Dios es un humanismo inhumano» (Caritas in veritate, 78). España necesita católicos «con los brazos levantados hacia Dios en oración» (Ibid. 79) para que, a ejemplo de los mártires, estemos dispuestos a vivir el Evangelio con radicalidad, conscientes de que el amor lleno de verdad es la única respuesta para el progreso de nuestro pueblo. La «conciencia del amor indestructible de Dios» (Ibid. 78) ha de sostenernos en el duro y apasionante empeño por la justicia, la paz y la unidad de nuestro pueblo. Revestidos de la gracia de Cristo e instruidos con la Doctrina Social de la Iglesia intentaremos multiplicar nuestros talentos con la firme esperanza de escuchar un día las palabras consoladoras de Dios nuestro Padre: «muy bien, eres un empleado fiel y cumplidor (…), pasa a disfrutar del banquete de tu Señor» (Mt 25, 23). Que por intercesión de la Virgen María y de nuestros beatos mártires el Señor nos lo conceda. Amén.

Fuente: infocatolica.com

domingo, 2 de noviembre de 2014

La revista Misión premia a Mons. Reig por su valiente defensa de la familia y la vida

La revista Misión entregará el próximo lunes uno de los galardones de los IV Premios Misión a la Familia al obispo de Alcalá de Henares, monseñor Juan Antonio Reig Pla, por su valiente y firme defensa» de la familia» y de la vida del no nacido, a pesar de los ataques y críticas recibidas por parte de algunas autoridades públicas». La ceremonia tendrá lugar a las 19.30 horas en la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid. 

En un comunicado, la publicación ha reconocido la labor del prelado al frente de la Subcomisión Episcopal para la Familia y Defensa de la Vida, de la que ha sido presidente desde 1999 hasta 2014, y ha destacado su impulso a la creación de diferentes proyectos pro-vida para acoger y ayudar a las madres embarazadas con problemas.

Asimismo, en la categoría de Familia, ha otorgado el galardón a la familia Martínez Arregui, por entregar su vida a mejorar la de los niños sin familia y, en particular, de los que tienen necesidades especiales». Esta familia, formada por Alejandro, Blanca, sus dos hijos adoptados y una niña en acogida, crearon la Fundación Acrescere, con la que dan formación, ayuda y soporte a otras familias para que acojan a alguno de los más de 15.000 menores que en España están esperando un hogar.

Mientras, el premio a la Institución ha recaído en la Asociación Persona y Familia, dedicada a la promoción, investigación y formación académica sobre el matrimonio y la familia. La asociación organiza en España las actividades y estudios del Pontificio Instituto Juan Pablo II, institución creada por el deseo del Pontífice que le da nombre. Cerca de mil familias y 300 sacerdotes, religiosos y solteros han cursado el Master en Pastoral Familiar.

Por otro lado, el Premio Comunicación ha sido para la empresa familiar Valiván, por su producción 'La Casita sobre la Roca', una serie de televisión emitida en el canal EWTN que, a través de dibujos animados, títeres, canciones y personajes, pretende comunicar la alegría del Evangelio a los niños.

Finalmente, la revista ha premiado a Línea Directa Aseguradora, en la categoría de empresa, por la promoción de la conciliación de la vida familiar, laboral y social entre sus empleados y por su empeño en la promoción de medidas de conciliación tales como el teletrabajo, la reducción de la jornada laboral a la carta, los horarios flexibles y el fraccionamiento del disfrute del permiso de lactancia», entre otras. El objetivo de los Premios Misión es reivindicar que la familia sea el motor de políticas empresariales, económicas, sociales y culturales», y reconocer el testimonio de tantas personas que con su vida y su trabajo demuestran que las familias fuertes permiten a la sociedad superar cualquier crisis».

Esta publicación para las familias católicas de España cuenta actualmente con más de 125.000 suscriptores que la reciben gratuitamente en su casa.

Fuente: Infocatolica

sábado, 1 de noviembre de 2014

Más de 800 personas cursan estudios superiores de teología en los últimos 15 años en Segorbe-Castellón

El Centro de Estudios Superiores de Teología de la diócesis de Segorbe-Castellón ofrece las titulaciones universitarias de Teología y Ciencias Religiosas a laicos, seminaristas y religiosas. Más de 800 personas han pasado por sus aulas en los 15 años que lleva abierto.

Los estudios de Ciencias Religiosas “están pensados fundamentalmente para laicos”, afirma don Juan Carlos Vizoso, director del Instituto de Ciencias Religiosas. El sacerdote asegura que “en el mundo en el que estamos es necesario presentar la persona de Jesucristo de una forma bella y atrayente y para eso hay que conocerlo primero”.

 En la actualidad, el Instituto de Ciencias Religiosas cuenta con dos sedes: una en Castellón, en la Concatedral de Santa María y la otra en Bechí. El Grado en Teología se imparte en los dos seminarios de la diócesis: el Mater Dei y el Redemptoris Mater.

Ayer jueves 30 de octubre, por la tarde, se inauguró el curso académico del Centro de Estudio Superiores de Teología, que proporciona estas dos titulaciones universitarias. El obispo de la diócesis, Mon. Casimiro López Llorente, presidió una misa, a continuación se presentó la Memoria del curso pasado.

Un carmelita del Desierto de las Palmas ofreció una ponencia sobre “Santa Teresa, santa para el siglo XXI” y se hizo entrega de los diplomas a los alumnos que finalizaron los estudios el curso pasado.

En el acto inaugural estuvieron presentes más de 70 alumnos y profesores.

(Diócesis de Segorbe-Castellón)

viernes, 24 de octubre de 2014

Las Doncellas Segorbinas celebran el sábado el aniversario de su refundación

El sábado que viene, 25 de octubre, las Doncellas Segorbinas de la Virgen de la Cueva Santa conmemorarán el 75 aniversario de su refundación. Ya en septiembre, con motivo de la fiesta de la Patrona de Segorbe, hubo una primera celebración en la que la actual Junta invitó a participar de manera particular en la procesión a cien de las primeras integrantes desde 1940. Entre las más mayores, con más de 90 años, siguen vivas Encarna Carrión y Purificación Carot, que no pudo asistir por motivos de salud. Esta semana se celebrará una eucaristía en la Iglesia del Seminario a las 12h, seguida de un tiempo de oración y un ágape fraterno.

Las Doncellas Segorbinas es una asociación vinculada a la advocación de la Virgen de la Cueva Santa que cuenta con más de 800 asociadas. Además de cuidar de la imagen de la patrona de la ciudad en Seminario, organizan la fiesta y diversas actividades lúdico culturales para niños y jóvenes, como un concurso de poesía y otro de dibujo. La actual Junta, integrada únicamente por chicas solteras, está formada por Begoña Borrás, presidenta, Victoria Giménez, secretaria, Estefanía Sales, tesorera, y MªTeresa Giménez, Elisa y María Serra, Wendy Muñoz, Irene Ferrer y Carmen Sánchez, vocales.

Fuente:obsegorbecastellon.com

Más de 250 profesores de Religión reciben la Missio de manos del obispo de Segorbe-Castellón

Castellón/ESPAÑA.- Más de 250 profesores de religión de la Diócesis de Segorbe-Castellón recibieron ayer por la tarde, 21 de octubre, la “Missio Canónica” de manos del Obispo Mons. Casimiro López Llorente, para poder impartir religión y moral católica en colegios públicos y concertados. La entrega tuvo lugar en el marco de una Eucaristía en la Basílica de la Virgen del Lledó

Mons. Casimiro López Llorente aseguro que “ante una sociedad que hace aguas, los jóvenes están pidiendo valores, los valores del Evangelio”

El obispo insistió a los profesores en que “lo realmente importante” es su testimonio de vida: “no podemos dar a conocer a Dios a nuestros alumnos, dijo, si primero no lo conocemos y, más aún, si no lo vivimos”. Y en este sentido, les recomendó “estar integrados en las parroquias”. López Llorente resaltó la importancia que tiene para un profesor de Religión la formación permanente e integral, el cuidar la vida espiritual, el participar en la comunidad eclesial donde estén, así como aprovechar la formación que ofrecen sus centros educativos y la Delegación de Enseñanza.

 Mons Casimiro López pidió a todos los profesores que vivan “con dedicación y entrega la misión que tienen en sus manos” y que sean “discípulos misioneros para contribuir en la formación de ese “hombre nuevo” que está creciendo”.

Además de la DECA, como condición indispensable para ejercer la docencia de la Religión y Moral católica en Primaria y la Licenciatura en Ciencias Religiosas para Secundaria, el profesor recibe la Misión Canónica, es decir, el envío oficial del Obispo de la Diócesis para que realice la tarea que la Iglesia le encomienda en el Centro educativo, por la cual le reconoce y acredita la idoneidad eclesial católica.

(Diócesis de Segorbe-Castellón)

martes, 21 de octubre de 2014

Misa de Acción de Gracias por la beatificación de Álvaro del Portillo

El obispo diocesano, Mons. Casimiro López presidió la Misa en Acción de Gracias por la beatificación, el pasado día 27 de septiembre, de Álvaro del Portillo, obispo y sucesor de San Josemaría Escrivá al frente del Opus Dei. Más de un centenar de personas participaron en la celebración.

Mons. Casimiro López Llorente destacó su humildad y fidelidad a la Iglesia. Y dijo que, como todos los santos, es un modelo de cómo imitar a Jesucristo.

Del Portillo fue un sacerdote madrileño que se distinguió por su manera de encarnar el espíritu del Opus Dei, que es santificarse en las tareas ordinarias. Del Portillo vivió con gran pasión y en grado heroico su vocación y amor a la Iglesia y a la Obra.

Fuente: obsegorbecastellon.es

domingo, 19 de octubre de 2014

El obispo de Segorbe-Castellón recuerda el compromiso solidario de los misioneros y misioneras

El obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente, dedica su carta semanal a la Jornada del Domund que se celebra este domingo.

Octubre es el mes misionero por excelencia. Este domingo, 19 de octubre, celebramos con toda la Iglesia católica la Jornada Mundial de las misiones, el día del Domund.

 Cada año, este día constituye una ocasión privilegiada para que todos los integrantes del Pueblo de Dios tomemos conciencia de la permanente validez del mandato misionero de Jesús de hacer “discípulos a todos los pueblos” (Mt 28, 19), porque aún son muchos los que no conocen a Jesucristo. El mandato y el compromiso misionero, también en la misión ad gentes, valen para todos, porque la misión atañe a todos los cristianos: a nuestra Iglesia diocesana, a las parroquias, y a las comunidades, movimientos y asociaciones eclesiales. Todos los miembros de la Iglesia estamos llamados a participar en la misión que el Señor nos ha confíado, ya que la Iglesia es misionera por naturaleza: la Iglesia ha nacido “en salida”, nos dice el Papa Francisco.

El encuentro con Jesucristo llena el corazón de alegría e impulsa a todo cristiano a confesar y testimoniar su fe en Cristo para que la alegría de la salvación llegue a todos. Quien se ha encontrado personalmente con Jesucristo no puede retenerlo para sí; el amor personal de Dios que experimenta y la alegría que brota del encuentro sanador y salvador con Cristo, le impulsa a anunciarlo con alegría a los demás por la palabra y por el testimonio de vida. Es lo que experimentaron aquellos setenta y dos discípulos a quienes Jesús envío de dos en dos a anunciar, a proclamar que el Reino de Dios había llegado, y a preparar a los hombres al encuentro con Jesús. Después de cumplir con esta misión de anuncio, los discípulos volvieron llenos de alegría: la alegría es un tema dominante de esta primera e inolvidable experiencia misionera.

Esta misma alegría es la que testimonian una y otra vez nuestros misioneros que entregan su vida, aún a riesgo de perder la salud y su vida, como ocurre en los países que sufren la epidemia del ébola. Ellos prefieren siempre quedarse en la misión y no abandonar a los suyos para compartir con ellos su experiencia del amor de Dios. Por ello, esta Jornada debe servir para renovar y potenciar nuestro recuerdo agradecido, nuestra oración sincera y nuestro compromiso solidario con tantos misioneros y misioneras, que, siguiendo la llamada del Señor, lo han dejado todo y entregan su vida para que la Buena Nueva resuene en todos los continentes. Ofrezcamos nuestra oración y tengamos gestos concretos de solidaridad para ayudar a las Iglesias jóvenes en los territorios de misión. Son muchas y, en algunos casos extremas, las carencias y necesidades materiales de los misioneros en el cumplimiento de su tarea evangelizadora y de promoción del desarrollo integral de las personas, en especial de los más pobres.

No podemos dudar que la colecta de esta Jornada va destinada totalmente a las misiones y así a los más desfavorecidos de la tierra. Incluso en tiempos de crisis económica, su situación de olvido, de descarte, de pobreza, de injusticia y de marginación nos sigue interpelando y nos llama a un mayor esfuerzo en nuestra colaboración generosa en la colecta de este día. No busquemos justificaciones fáciles para inhibirnos.

Redoblemos, pues, nuestro compromiso con la misión y las misiones. El Señor nos llama a compartir nuestros bienes para que alegría del Evangelio llegue a todos, a los más pobres y desfavorecidos de la tierra.

Con mi afecto y bendición, 
Casimiro López Llorente 
Obispo de Segorbe-Castellón

jueves, 16 de octubre de 2014

Demandan en España a Mons. Reig Pla por denunciar "holocausto" del aborto

D. Juan Antonio Reig Plá
El lobby anti-vida en España presentó hoy una demanda contra el Obispo de Alcalá de Henares, Mons. Juan Antonio Reig Pla, por haber criticado en una carta pastoral el retiro del proyecto para la reforma de la ley del aborto, en la que comparó al autodenominado “Tren de la libertad”, una institución que reúne a diversos grupos abortistas, con los trenes que llevaban a los judíos a los campos de concentración nazi en Auschwitz.

El “Tren de la Libertad” exige al Obispo que "se retracte públicamente" y que pague "una indemnización simbólica" que se destinará a la "planificación familiar". La demanda también se ha presentado contra el sitio web Infovaticana, por haber publicado el texto de Mons. Reig Pla.

"Creemos que comparar esta movilización cívica y social en defensa del acceso a un derecho básico de las mujeres con los campos de concentración que los nazis instalaron en Polonia para el exterminio de más de un millón de personas constituye un delito de injurias graves", afirman los demandantes.

Por su parte, el secretario general del PSOE de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez Palacios, espera que en el municipio local se llegue al "máximo consenso" para "que todos los grupos parlamentarios apoyen la destitución del Obispo y la pidamos a la Conferencia Episcopal y, por consiguiente, al Papa Francisco".

En la carta pastoral, el Obispo de Alcalá de Henares lamentaba que, “desde la lógica del horror el secretario general del PSOE ensalzó en la Estación de Atocha de Madrid el mal llamado ‘tren de la libertad’ en el que algunas mujeres reclamaban ‘el derecho a decidir matar inocentes’; este tren, como los trenes de Auschwitz que conducían a un campo de muerte, debería llamarse, no el ‘tren de la libertad’ sino, el ‘tren de la muerte’, del ‘holocausto’ más infame: la muerte directa y deliberada de niños inocentes no-nacidos".

El Prelado denunciaba el "holocausto silencioso" del aborto y señalaba además que "no se puede justificar, apelando a la libertad, lo que de sí es una acción criminal que mata a un inocente, corrompe a la mujer, a quienes practican el aborto, a quienes inducen al mismo y a quienes, pudiendo con medios legítimos, no hacen nada para evitarlo". Comunicado del Obispado de Alcalá de Henares

Tras conocer la demanda presentada contra Mons. Reig Pla, el Obispado de Alcalá de Henares dio a conocer un comunicado en el que afirma que “como profetizó Cristo, se constata que la historia de persecución a la Iglesia Católica se repite desde hace 2000 años”.

El texto indica luego que “como ya se ha explicado en otras ocasiones, este respeto por las personas e instituciones obliga a recordar la inviolabilidad del derecho humano fundamental a la libertad religiosa. Ninguna institución humana está legitimada para juzgar y, menos aún, impedir que se enseñen los contenidos de la doctrina católica”.

Además, precisan, “cuando tal juicio e intento de conculcar la libertad religiosa procede formalmente de una institución política, se produce una triste e intolerable violación de los derechos de la Iglesia”.

La diócesis de Alcalá de Henares, prosigue el texto, “confiesa todos y cada uno de los artículos de la fe y la moral católicas, también en lo que se refiere al crimen abominable del aborto (Cf. Concilio Vaticano II, Gaudium et spes, 51), ciertamente un continuo holocausto de vidas humanas inocentes (San Juan Pablo II, 29-12-1997). Dicha doctrina puede consultarse en el Catecismo de la Iglesia Católica y en otros documentos de la Iglesia.

 “Nuestro padre y pastor, el Obispo de Alcalá de Henares, Mons. Juan Antonio Reig Pla, siempre ha enseñado, con claridad, caridad y verdad, la doctrina católica; y así seguirá haciéndolo, con la gracia de Dios. Además, Mons. Reig da gracias a Dios por el enorme privilegio de verse perseguido por causa de la justicia, ahora en defensa de los niños no-nacidos”.

El comunicado concluye exhortando a la oración por la libertad religiosa en España, por el Obispo y por quienes “sostienen las ‘estructuras de pecado’ que promueven el inexistente derecho a matar inocentes ?el lobby abortista y sus apoyos políticos y mediáticos”.

Fuente: aciprensa.com

lunes, 13 de octubre de 2014

El obispo de Segorbe-Castellón insta a los presos a que "recuperen su dignidad"

foto:merced-albocacer
El obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente, dedica su carta dominical de esta semana a la próxima celebración, el día 24, de la festividad de la Virgen de la Merced, patrona de las instituciones penitenciarias.

Queridos diocesanos:

Este próximo miércoles, 24 de septiembre, celebraremos la memoria litúrgica de Ntra. Sra. de la Merced, patrona de las instituciones penitenciarias. Comienzo saludando cordialmente a todos los hermanos y hermanas que están privados de libertad, a los funcionarios de los
Centros Penitenciarios de Castellón y a los capellanes y voluntarios del la Pastoral Penitenciaria. A todos os deseo una celebración gozosa de la fiesta de la Virgen de la Merced.

El servicio pastoral de nuestra Diócesis en los dos centros penitenciarios de Castellón tiene su origen en la bienaventuranza de Jesús: “venid, benditos de mi Padre… porque estuve en la cárcel y me visitasteis” (Mt 25, 34.36). Jesús se identifica en este pasaje evangélico con los encarcelados: "cuando lo hicisteis con uno de estos mis pequeños hermanos, conmigo lo hicisteis". Ya la Iglesia primitiva muestra su preocupación por los encarcelados compartiendo su sufrimiento (Hbr 13,3).

Los capellanes y voluntarios seglares que trabajan en la pastoral penitenciaria, en comunión y en nombre de nuestra Iglesia particular, tratan de vivir las palabras de Jesús. Al mismo tiempo trabajan por crear en los centros penitenciarios una autentica comunidad de creyentes. En ellos fomentan la creación de catecumenados de adultos y ofrecen a los internos la oportunidad de tener un encuentro fuerte con Jesucristo, por medio de la recepción de los sacramentos de la iniciación cristiana. Convencidos de que Jesucristo es el mejor tesoro que posee la Iglesia y de que su seguimiento es fuente de gozo, paz, alegría y esperanza, los capellanes y voluntarios tratan de compartir con los internos su mayor riqueza, conscientes de que éste es el mejor servicio que pueden prestarles. En su trabajo en la cárcel no olvidan la promoción humana de los internos, la meta de la reinserción y la relación con sus familias, para lo cual es importante la conexión con las parroquias de origen y la colaboración con Caritas Diocesana.

Capellanes y voluntarios tienen por delante una importante tarea: siendo heraldos de la misericordia y del perdón infinitos de Dios, han de ayudar a los internos a recuperar su dignidad personal y la esperanza así como a redescubrir el sentido de la existencia, de manera que, con la gracia de Dios, puedan transformar su propia vida, reconciliarse con su entorno e iniciar una vida honesta y recta en el seno de la sociedad.

 En las vísperas de la fiesta de Ntra. Sra. de la Merced agradezco a capellanes y voluntarios su excelente servicio e invito a todos los fieles de la Diócesis y a las parroquias a colaborar en la pastoral penitenciaria: en primer lugar con la oración que sostiene las actividades que se realizan, y también implicándose personalmente en las visitas, en las ayudas económicas y en el trabajo pastoral en la prisión y fuera de ella.

 Concluyo dirigiéndome a los internos de los Centros Penitenciarios de Castellón: Queridos amigos: Dios os ama. Esta es la primera seguridad con que podéis contar y el manantial de la verdadera alegría. Fuera de la prisión hay muchas personas que tienen todo lo que se puede desear y no son felices. Por el contrario, se puede carecer de libertad y de dinero, y vivir con paz y alegría, si en nuestro corazón está el Señor. Este es el secreto de la auténtica alegría: que os dejéis amar por Dios y que Él ocupe el primer puesto en vuestra vida. Contad con mi afecto y con mi oración por vosotros y por vuestras familias.

Con mi afecto y bendición, 
Casimiro López Llorente 
Obispo de Segorbe-Castellón

sábado, 11 de octubre de 2014

El obispo de Segorbe Castellón recuerda el papel renovador de Santa Teresa de Jesús

El obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente, dedica su carta dominical de esta semana al inicio, el próximo 15 de octubre, del Año Jubilar Teresiano.

Teresa de Jesús, maestra de renovación de la Iglesia

Queridos diocesanos:

 Con motivo del V Centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús, toda la Iglesia católica en España celebramos un Año Jubilar Teresiano, desde el próximo miércoles 15 de octubre hasta el mismo día de 2015. El Papa Francisco ha concedido gracias jubilares para todas las diócesis de España durante este Año Jubilar.

Teresa de Cepeda y Ahumada, Teresa de Jesús, nace en Ávila el 28 de de 1515 y muere en Alba de Tormes el 15 de octubre de 1582. Teresa fue una mujer adelantada a su tiempo, cristiana cabal y admirable, mística y andariega, reformadora y, sobre todo, santa. Le tocó vivir tiempos recios en la Iglesia y en el mundo, en especial la irrupción de la reforma luterana; y -como ella decía- "en tiempos recios, son necesarios amigos de Dios". Medio milenio desde su nacimien­to, Teresa de Jesús no ha pasado de moda; su ejem­plo sigue siendo válido y necesario para los creyentes de hoy y de todos los tiempos como fuente inagotable de virtud y de verdadera renovación y reforma.

La historia nos enseña que sólo los santos son ca­paces de superar las crisis. Teresa de Jesús, sacando fuerzas de flaquezas, unida esponsalmente a Jesu­cristo, reformará la orden carmelitana, fundará nuevos conventos, describirá como nadie las etapas y los estadios del alma y de su camino de perfec­ción, alcanzará la séptima morada del castillo interior y será para siempre maestra de vida y de oración. La clave de la vida y de la obra fundadora y reformadora de Teresa fue su amor apasionado por Jesucris­to, hasta tal punto que El le otorgó gracias y vi­siones extraordinarias.

Teresa de Ávila, una de las místicas más reconocidas, es una excelente maestra de oración. Orar es estar con Jesús, hablar con Jesús, tratar de amistad con El, que sabemos nos ama, aun estando muchas veces a solas. Ella nos enseña el camino de la ora­ción perseverante, el camino de la humildad, que es andar en la verdad, el camino de la cruz y el camino de la alegría. Precisamente por ello nos muestra el camino de la renovación personal, comunitaria y pastoral que nos pide hoy nuestra Iglesia para ser discípulos enamorados y misioneros ardorosos de Jesucristo. Las nuevas expresiones y los nuevos métodos que pedía San Juan Pablo II sólo pueden ser el resultado de un nuevo ardor. Ese fuego es el que nace en el corazón por el encuen­tro personal, renovado en la oración diaria, con el Señor Jesús, a quien Tere­sa reconoce como el Amigo verdadero y el Esposo fiel.

Como enseña el Papa Fran­cisco en Lumen fidei (n. 47), amar signi­fica mirar la realidad con los ojos del amado. Al contemplar a los demás como Cristo los ve, Teresa de Jesús se con­mueve por quienes, no participando de la alegría de la fe, se sumergen en la tristeza eterna. Ella se determina a pasar cualquier trabajo por ofrecer a sus her­manos el gozo de la salvación. Su contacto asiduo con el Resucitado lleva a la santa no solo a cambiar su vida, sino también a transformar las estructuras eclesiales para responder adecuada­mente a la modernidad. Esa es precisamente la tarea que los cristianos estamos llamados a afrontar en esta hora: una conversión que sólo es auténtica si es fecunda, si nos pone en estado de misión. La felicidad irradia, es contagiosa, y permite a cuantos nos ro­dean vislumbrar la belleza de Aquel cuya luz disipa toda tiniebla.

Que este Año Jubilar Teresiano nos ayude a todos a la renovación desde Cristo para salir con nuevo ardor a la misión.

Con mi afecto y bendición,
Casimiro López
Obispo de Segorbe-Castellón

viernes, 10 de octubre de 2014

LA VIRGEN MARÍA, REINA DE LA HISPANIDAD

Por Ángel David Martín Rubio para elmunicipio.es

Es bien conocida la página de Vázquez de Mella en la que, al evocar una serie de episodios de nuestro pasado más glorioso, acaba afirmando que «No hay acto nacional de trascendental importancia en que no aparezca la imagen de María».

A esta conclusión se llega porque el culto y el amor a la Virgen María se encuentran enlazados con toda la historia de España y brilla como una honrosa distinción en el espíritu de sus hijos. Entre esos hechos, no podían faltar el descubrimiento, conquista y evangelización de la América hispana. León XIII, en su carta apostólica “Quarto abeunte saeculo”, del 16 de julio de 1892, con ocasión del IV Centenario del Descubrimiento de América, enlazó la obra de Colón con la Virgen, recordando que la Madre del Señor asistió al Almirante en las dos fases del Descubrimiento: Preparación y travesía.

La historia nos dice que Colón y sus hombres desde un principio pusieron su empresa en manos de la Virgen María y América se llenó de lugares, santuarios, cofradías…, que conquistadores, misioneros y pobladores dedicaban a los misterios de mayor tradición hispana y a las advocaciones de sus propios lugares de origen.

Siglos más tarde, a propuesta unánime de las Cortes Generales Españolas, Carlos III solicitaba al Papa la declaración del patronazgo de la Inmaculada Concepción sobre España. Respondiendo a esta petición, Clemente XIII firmaba un Decreto el 8 de noviembre de 1760 proclamando a la Inmaculada como Patrona de España y el 25 de diciembre de 1760, la bula “Quantum Ornamenti” ratificaba de manera solemne esta proclamación. El 16 de enero de 1761, Carlos III firmaba un Decreto-Ley por el que proclamaba patrona de todos sus Reinos «a esta Señora en el misterio de su Inmaculada Concepción». Esta disposición de Ley lleva por título «Universal Patronato de Nuestra Señora en la Inmaculada Concepción en todos los Reinos de España e Indias». De esta manera alcanzaba reconocimiento oficial la veneración que durante siglos se ha dirigido en nuestra Patria a la Virgen Santísima bajo este Misterio. Y su protección se extiende a «todos los Reinos de España e Indias», es decir lo que entendemos hoy por España y las naciones de Hispanoamérica, donde recibe culto en numerosas advocaciones que, al igual que ocurría en la Península, jalonan la historia de los territorios situados entre el Atlántico y el Pacífico.

Reina de la Hispanidad

A comienzos de la década de los treinta del pasado siglo, la Cultural Isidoriana de Buenos Aires, anunció el propósito de proponer a todos los prelados hispanoamericanos que la Inmaculada Concepción, fuese proclamada solemnemente, Reina de la Hispanidad. Propondría, asimismo, que fuera el Rey de España, como sucesor de los Reyes Católicos quien presidiera la ofrenda y leyera el acto de consagración en presencia de todas las delegaciones y, por último pediría al Papa que enriqueciera con indulgencias la jaculatoria “Regina Hispanitatis, ora pro nobis” (Reina de la Hispanidad, ruega por nosotros), y a ser posible, fuese incluida en la Letanía Lauretana.

En 1946, el Consiliario Nacional de Acción Católica Española, Zacarías de Vizcarra (1880-1963), publico unas líneas elogiosas sobre la obra de Francisco Gutiérrez Lasanta titulada “La Virgen del Pilar, Reina y Patrona de la Hispanidad”. La tesis fundamental del libro quedaba a juicio de Monseñor de Vizcarra ampliamente demostrada: ninguna otra advocación de la Santísima Virgen puede alegar los mismos títulos que la del Pilar, para ser proclamada Reina y Patrona de la Hispanidad.

Recordaba también el autor como dieciséis años antes había enviado desde Buenos Aires al Congreso Mariano Hispano-Americano de 1929, en nombre del Clero Español de la República Argentina, una memoria impresa, con el título “Reina de la Hispanidad”, proponiendo que el Congreso pidiese a la Santa Sede que, tanto en España como en las demás naciones hispánicas, se pudiese añadir en la Letanía Lauretana la invocación “Regina Hispanitatis, ora pro nobis”, y fundamentando ampliamente las razones de esta petición.

Zacarías de Vizcarra relató ampliamente en “El Español” (7-octubre-1944) la ocasión que determinó el descubrimiento y promoción del vocablo “Hispanidad”, cuya creación le atribuían el propio Ramiro de Maeztu (autor de Defensa de la Hispanidad) y el cardenal Gomá (que pronunció un trascendental discurso sobre el tema):

«Por iniciativa del cónsul argentino D. Enrique Martínez Ituño, se celebró por primera vez, en la Casa Argentina de Palos, la fiesta del 12 de octubre, con el nombre de «Día de la Raza», en 1915. Esta iniciativa encontró eco simpático en América y, sobre todo, en Buenos Aires, donde tenía entonces mi residencia. En 1917, el Gobierno Argentino declaró fiesta nacional la fecha del 12 de octubre; y, aunque en el decreto no se le llamaba “Día de la Raza”, ni aparecía tampoco la palabra “raza” en todo el texto del mismo, los periódicos comenzaron a usar dicha denominación, que a mí y a otros muchos nos parecía “poco feliz y algo impropia”, como escribí en una revista de Buenos Aires. En efecto, España es la menos racista de todas las naciones. Ha sabido asociar a su familia étnica toda clase de razas blancas, negras, amarillas y cobrizas, en el Viejo y Nuevo Mundo, desde los aborígenes ibéricos, célticos, ligúricos, etc, hasta los semitas e indoeuropeos de Cartago, Arabia, Berbería, Grecia, Roma y Germania, y desde los negros o morenos de África hasta los cobrizos de América y los amarillos de Filipinas. Es ciertamente chocante que llamemos “raza” al mosaico hispánico de razas. No sé qué pensarán en sus adentros los filipinos auténticos, cuando los españoles les hablan de “nuestra raza” o lo que se imaginarán los españoles y americanos, cuando aquéllos a su vez aludan a la raza común.

Además, el artículo “la”, antepuesto a “raza”, hace pensar que no se trata de una raza cualquiera, sino de “la raza” por excelencia, la única que merece plenamente la denominación de “raza”.

Por todas estas razones busqué un nombre más simpático y exacto con que pudiera denominarse el conjunto de las veinte naciones hispánicas, para reemplazar a la palabra “raza” y designar con mayor propiedad el “Día de la Raza”.

Y encontré la palabra anticuada “HISPANIDAD”, inútil ya en el sentido que le daban los diccionarios y los autores antiguos, pero capaz de recibir dos significaciones nuevas que nos prestarían un gran servicio”.

En un artículo publicado en ABC (30-enero-1944), Eduardo Paradas ponía en relación la iniciativa que estamos glosando con la única posibilidad de una auténtica fundamentación de la Hispanidad, más allá de las comunes raíces culturales, recurriendo a sus raíces religiosas:

«Sólo la Religión podía servir de palanca de Arquímedes. Si los pueblos americanos aceptaron en otro tiempo los beneficios de la cultura hispánica, fue en tanto en cuanto los recibieron engarzados en el tesoro de la fe. Providencialmente, aun existía ese tesoro como fundamento primario y base principal del hispanoamericanismo, aunque por entonces no se le dio pábulo a causa de las vicisitudes de aquellos luctuosos tiempos […]

Aún abrigamos la firme confianza de que la nueva jaculatoria Regina Hispanitatis, ora pro nobis sea repetida diariamente en ambos mundos por más de cien millones de almas. Hay señales indelebles de que la Divina Providencia quiere perpetuar el milagro de un arco iris por encima del Atlántico»

El proyecto de proclamar a la Inmaculada como Patrona de la Hispanidad y de añadir la invocación Regina Hispanitatis a la Letanía Lauretana no salió adelante. No obstante, cuando Argentina se consagraba al Sagrado Corazón de Jesús, el 28 de octubre de 1945, Pío XII se refirió a España llamándola «gran madre de la Hispanidad»:

«Vosotros, dignos hijos de la República Argentina, habéis escrito toda vuestra historia bajo el signo de Jesucristo; pero hoy, en esta hora solemne, siguiendo principalmente el ejemplo de tantas naciones, hermanas vuestras de lengua y de sangre, —y de la misma gran madre de la Hispanidad— habéis decidido saltar a la vanguardia, al puesto de los que no se contentan con menos que con ofrecerlo todo.».

Y el 28 de abril de 1958, con motivo de la beatificación de la Madre Teresa Jornet, en el discurso pronunciado en tal ocasión el Papa calificó a la Virgen del Pilar de “Reina de la Hispanidad”. Muchos lo interpretaron como una especie de sanción solemne y reconocimiento oficial de este título glorioso.

El Pilar y Guadalupe

Tanto la Virgen del Pilar como la de Guadalupe han sido proclamadas como reinas de la Hispanidad. Para esto es En relación con la Virgen del Pilar subrayaba Zacarías de Vizcarra que, para atribuirle esta consideración era necesario que la advocación elegida recuerde no solamente a la Virgen María y a sus singulares privilegios de orden general, sino algún beneficio especial directamente relacionado con la entidad patrocinada. Concretamente, tratándose de la gran familia de naciones que se denomina Hispanidad, se necesitaba algún hecho especialmente relacionado con todos los miembros de ella, tanto los del Viejo Mundo como los del Nuevo.

«Ahora bien; el hecho especial directamente relacionado con todas las cristiandades hispánicas de ambos hemisferios es la maternidad originaria de su Fe y de sus Iglesias, maternidad que ostenta especialmente la Virgen Santísima bajo el título del Pilar, por el hecho de haber venido a España en carne mortal, como misionera de la fe de su Hijo y consoladora y alentadora del Apóstol Santiago y de sus discípulos, primer núcleo de la Iglesia Hispánica, de la cual tomó posesión al estilo romano, plantando en su suelo a modo de mojón posesorio, el Pilar de jaspe que por ministerio angélico, según antiquísima tradición aprobada por la Iglesia, trajo de Jerusalén y entregó a Santiago como base para edificar en su nombre el primer templo mariano del mundo» (Vizcarra, l.c.).

La vocación hispánica de la Basílica del Pilar es inseparable de la que late en el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, en Extremadura que estuvo íntimamente ligado tanto al descubrimiento de América como a su colonización y evangelización, con hechos tan significativos como el bautismo de los primeros indios traídos desde América. Guadalupe es también lugar en el que se hicieron presentes los Reyes Católicos, Cristóbal Colón o Hernán Cortés.

El 12 de octubre de 1928, la Patrona de Extremadura fue coronada como Reina de la Españas por el cardenal Segura. El término las Españas delimita con toda propiedad a los pueblos, extraordinariamente diversos y esparcidos, que en la Península y en América formaron la cristiandad hispánica, reserva y retaguardia en medio de la apostasía europea de la moderna civilización antropocéntrica, absolutista o revolucionaria.

«Históricamente, la tradición de las Españas es el haz unitario, el cálido crisol donde se integran y sintetizan los conjuntos de las tradiciones de cada uno de los pueblos componentes.

O sea, es la tradición única, pero variada y multiforme, en sus expresiones sociales e históricas a tenor de la idea de los fueros.

En la Península Ibérica comprende las tradiciones particulares de Asturias, Galicia, León y Portugal; de Castilla, Navarra y Vascongadas; de Cataluña, Aragón, Valencia y Baleares; de Extremadura, la Mancha y Murcia; de Jaén, Córdoba, Sevilla y Granada; de Canarias. En América comprende la de todos los pueblos que hay desde el Río Grande del Norte y las misiones de Florida, Tejas y California, hasta los estrechos descubiertos por Fernando de Magallanes. En Oceanía, la de Filipinas y otras más menudas. En Asia y África, las de las provincias portuguesas en ambos continentes. Y en Europa, la Europa geográfica, los pedazos que un tiempo fueron hispanos en plenitud de gestas, de ideas y de sentires, como Nápoles y el Franco-Condado, Cerdeña y Flandes, Sicilia y el Milanesado, Malta y el Finale. Todos ellos, pueblos partícipes en la empresa universal que capitaneó Castilla y sostuvo León, la soñadora de imperios.

Tal variedad era el aspecto interno de una solidísima unidad exterior, cimentada en la fuerza inquebrantable de la vigencia de la fe religiosa y de la pasión monárquica, del sentido católico misionero y e la lealtad al rey común de las Españas. La variedad foral fue posible porque cristalizaba en realidades de historia cuajada en culturas y en instituciones aquella ciclópea ilusión de servir mancomunadamente al mismo Dios y al mismo rey (Francisco Elías de Tejada y Spínola, Rafael Gambra Ciudad y Francisco Puy Muñoz, ¿Qué es el Carlismo?, nº 79, Madrid: Escelicer, 1971).

* Un año más, al celebrar la Fiesta de la Hispanidad hacemos votos para que se acoja la feliz iniciativa de dar cabida en las Letanías del Rosario a la invocación a la Reina de la Hispanidad que todos debemos hacer nuestra:



¡REGINA HISPANITATIS, ORA PRO NOBIS!
¡REINA DE LA HISPANIDAD, RUEGA POR NOSOTROS!